La marca transalpina ha hecho un buen papel en 2020. A pesar de un año marcado por la pandemia de coronavirus y sus consecuencias, como el confinamiento y los paros de producción, Ducati registró un fuerte aumento de las ventas en todo el mundo y en China en particular. La familia Scrambler y la nueva Streetfighter fueron un éxito entre los fans de Ducati. También en España las ventas han despegado.
La empresa de Borgo Panigale, cerca de Bolonia, entregó más de 4000 Ducatis el año pasado, gracias a una fuerte recuperación en el segundo semestre de 2020. El primer semestre, por su parte, estuvo marcado por una parada de producción de siete semanas entre marzo y abril.
«Ducati ha sabido aprovechar la tendencia de recuperación del mercado de las dos ruedas iniciada en junio, logrando un excelente segundo semestre con un resultado mejor de lo que esperábamos en marzo», se felicitó Claudio Domenicali, patrón de la marca propiedad del fabricante alemán de automóviles Volkswagen, a través de su filial Audi.
No es de extrañar que la Streetfighter V4, que llegó a los concesionarios el año pasado, fuera el modelo más vendido con más de 6700 unidades. La familia Scrambler fue la gama más vendida con más de 9000 motos en todo el mundo.