La reducción de las tierras raras en los motores eléctricos será la principal tarea de la industria en el futuro. Toyota está -como con los híbridos- una vez más un paso por delante de la mayoría. Ahora ha desarrollado un imán resistente al calor que utiliza muchas menos tierras raras. La base de los motores y generadores eléctricos de los coches híbridos y eléctricos.
Abandono de las tierras raras o al menos reducción
El nuevo imán desarrollado por Toyota prescinde por completo del terbio (Tb) y el disprosio (Dy). Dos (especialmente) tierras raras que son extremadamente caras y se encuentran «en regiones geopolíticamente arriesgadas». Además, la demanda de neodimio (Nd) se redujo en un 50%. En parte, el componente se sustituyó por lantano (La) y cerio (Ce), dos tierras raras menos caras.
El neodimio es importante para garantizar una elevada fuerza coercitiva y, por tanto, la magnetización incluso a altas temperaturas. El movimiento de un motor eléctrico es el resultado de las fuerzas de atracción y repulsión generadas por varios campos magnéticos. Si sólo se reduce el contenido de neodimio, disminuye el par del motor. – Toyota
El nuevo imán estará listo para la producción en serie en 2020
Con la nueva tecnología, se han producido imanes que tienen una relación de resistencia al calor y coercitividad similar a la de los imanes utilizados anteriormente. Sin embargo, con menos contenido de neodimio. En definitiva, Toyota quiere lograr un equilibrio entre la oferta y la demanda de tierras raras. El imán aún está en fase de desarrollo, pero se espera que se utilice en motores de dirección asistida eléctrica a partir de 2020.
En los próximos diez años, se espera que también se utilice en motores de alto rendimiento para accionamientos electrificados.
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